Manuel Marroquin

José Manuel Marroquín
Por: Lina Domínguez Sarasti
Escritor y estadista colombiano quien subió a la presidencia de su país en 1900 hasta 1904. Nació en Bogotá el 6 de Agosto de 1829 y murió el 19 de septiembre de 1908. Fue miembro de la reconocida familia Ricaurte, la cual estuvo involucrada en la lucha por la independencia colombiana. Fueron sus tíos y tías quienes lo educaron y le brindaron la mejor educación, ya que desde muy joven quedo huérfano de padres, quienes se llamaron José María Marroquín y Trinidad Ricaurte.
Escritor que durante mucho tiempo redacto para periódicos y novelas didácticas, pero que llego a la fama con tu novela El Moro. Es uno de los tantos escritores colombianos que a pesar de no haber recibido educación literaria (en especial Marroquín, abandonó sus estudios de derecho antes de finalizarlos) logran llegar a ser grandes literatos. Entre sus novelas están: Blas Gil (1896), Entre Primos (1897), El Moro (1897) y Amores y Leyes (1898). Su novela principal, El Moro, hace una descripción sobre la vida de un caballo, con el cual compartió gran parte de su vida. Y como no era raro, en el pintaba la naturaleza, las costumbres, la vida de los diversos climas,
Cuando nuestra admiración sube de punto es cuando lo vemos, por boca de su caballo, describir la vida intima de estos animales, que en sus múltiples modos de servir al hombre, están sujetos a miles de peripecias, todo lo cual supone una finísima observación y un cariño entrañable hacia el ser irracional que después del hombre es la criatura más bella de la naturaleza creada.
Sobre Blas Gil se puede de ir que con ella, hace referencia al desprecio que sentía por la política, tildándola de ser el ámbito de la vida más despreciable y asegurando que los políticos son seres ambiciosos y sin ética (a pesar de haber terminado directamente involucrado en ella), ya que Elisa se reúsa a casarse con Blas Gil antes de verlo involucrado en ella.
Esta novela biográfica, si tal puede llamarse, está inspirada, aunque remotamente, en las picarescas españolas del mismo género, en donde, sin duda alguna, el Sr. Marroquín ha encontrado buena parte de su inspiración. Blas Gil está formado por la narración de las aventuras de un pobre diablo que saliendo de su ciudad de provincia viene a Bogotá, donde tropieza con dos o tres colegios y universidades, sin dejar en ellos, sin dejar en ellos, según declaraciones de él mismo, huellas de su paso; y sin embargo…lo gradúan de doctor en leyes. Se conoce que no paso la escena en la época actual del Colegio del Rosario. Ya graduado Blas Gil sale a entendérselas hombre a hombre con el mundo; lo hecho anteriormente solo ha sido el apresto del combate: ahora ya tiene al enemigo al frente. El audaz héroe del Sr. Marroquín recorre en corto tiempo muchas faces de la vida de tunante; se hace periodista, diputado a asamblea, presidente de ella, militar, enamorado, jefe de casas de comercio, empresario de minas y qué sé yo que otras cosas.
Respecto a Entre Primos, es una novela que narra todo lo que tiene que vivir una pareja de primos, los cuales se aman y los cuales luchan contra las tradiciones de la época para lograr estar juntos. En esta obra, más que en cualquier otra, se ve la manera en que los personajes y la historia se basan en pura narración y descripción, ya que Marroquín no se toma el tiempo de hablar detalladamente y de manera romántica sobre los sentimientos de sus personajes. Finaliza con la muerte de Cecilia, causada por una lepra que padeció, pero cumpliendo su sueño de casarse con Pablo antes de morir. Adicionalmente, Amores y Leyes, es una novela que habla sobre la historia de una familia rica que debido a la injusticia y trampas del derecho, había quedado en la pobreza infinita. Después de vivir con resignación ven resurgir su situación económica gracias a los efectos retroactivos de una nueva ley. En esta obra lo que Marroquín intenta mostrar es el triunfo de la justicia a pesar de que se tome su tiempo.
En cuanto a la poesía, podemos encontrarla toda, recogida en el primer tomo de Parnaso Colombiano 1886. La mayoría de sus obras literarias fueron publicadas a nombre de pseudónimos como González González de la Gonzalera, Pedro Pérez de Perales y El parlanchin entremetido.
Su vida política se caracterizó por su llegada a la vicepresidencia colombiana en 1898 siguiendo al candidato presidencial Manuel Antonio Sanclemente. El presidente se enfrenta con dificultades para tomar posesión, por lo que Marroquín ejerce la presidencia de la Republica durante tres meses de manera temporal y supletoria. Posteriormente lidera el golpe de estado al presidente Sanclemente, llevándolo a gobernar desde 1900 hasta 1904. Marroquín no descansó en insistirle al presidente electo Sanclemente que firmara su dimisión, por lo que lo traslado a prisión, donde lo torturo física y psicológicamente: fue abofeteado, privado de sus alimentos y de dormir. Llegaron hasta el punto de arrastrarlo por el pelo y así y todo Sanclemente no se rindió.
Durante el periodo de su presidencia se dio fin a la Guerra de los Mil Días, junto con la separación de Panamá y el enfrentamiento contra las guerrillas que estaban siendo apoyadas por países como Nicaragua, Venezuela y Ecuador. Por medio de tratados de paz y negociaciones con las fuerzas revolucionarias, como el Tratado de Neerlandia el 24 de octubre de 1902; el de Wisconsin, el 21 de noviembre del mismo año, y el tratado de paz de Chinácota, Marroquín se encargo de recuperar la paz y el orden institucional ya que se concedió amplia amnistía y garantías para los revolucionarios;
El decreto 1718 del 24 de noviembre de 1902 declaró indultados a todos los individuos que participaron en la guerra y se dispuso la cesación de las hostilidades. El 1 de junio de 1903 fue levantado el estado de sitio, con lo cual concluyó la guerra civil más larga y sangrienta en la historia de Colombia. En los 218 combates que se libraron durante la guerra de los Mil Días, se destacó el valor de los soldados colombianos y el fanatismo ideológico de los partidos. La guerra acabó de arruinar la economía nacional y puso al país frente a numerosos y graves problemas económicos y sociales. La inflación llegó a su plenitud y motivó la desconfianza tanto exterior como interior.
Fue un gran partidario de ilustrar a los jóvenes en el buen gusto de la literatura, por medio de las cuales se nota su interés de corregir y enseñar al futuro colombiano. Por eso, durante su gobierno, el modelo educativo de Colombia fue reformado por medio de la ley 39 del 26 de octubre de 1903, la cual dividió la educación en un sistema escolar y en uno universitario, y la enseñanza oficial en primera, secundario, profesional, industrial y artística. Además, fundó la Academia Colombiana de la Lengua, En 1887 seria rector del Colegio Mayor del Rosario y en 1888 escribió su Diccionario Ortográfico.
En su tiempo libre, se dedico a disfrutar de la vida del campo, ya que a pesar de reconocer las ventajas de la ciudad capital, apreciaba sobremanera los climas más cálidos, la brisa, el campo y sobre todo los caballos. Se dedicó a las labores agrícolas en sus dos haciendas, y al colegio que fundó en Bogotá, en el cual formó a varias generaciones colombianas.
Biografía
• JOSE MANUEL MARRQUIN. [En línea] [Consultado en septiembre de 2011] disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Manuel_Marroqu%C3%ADn
• JOSE MANUEL MARRQUIN. [En línea] [Consultado en septiembre de 2011] disponible en: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/marroquin.htm
• MARROQUIN, JOSE MANUEL. [En línea] [Consultado en septiembre de 2011] disponible en: http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/biografias/marrjose.htm
• Revista del Colegio Mayor de Nuestra señora del Rosario. Volumen 5. Año 1909.