Enrique Recio Gil: nació en 1856 en Madrid, España. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Madrid. Participó en una exposición en 1884 y ganó, por tal motivo se fue a vivir a Roma con el premio, viviendo en Asis fue contratado por el gobierno colombiano por recomendación de Don Luis Llanos para que dictara la cátedra de dibujo en la Escuela de Bellas Artes de Bogotá en 1895.
En 1897 regresó a España a montar su propio taller y su discípulo fue Francisco A. Cano, sus temas eran costumbristas algo muy típico de la época y los paisajes. Murió probablemente en España en el siglo XX.
Sus principales obras son: retrato de Margarita de Austria (para el Colegio del Rosario) y el Guitarrista.
Luis García Hevia: nació en el Bogotá en 1816, estudió en el taller de Pedro José de Figueroa, fue el primer retratista que empleó el sistema de Daguerrotipo, también, pintó “la Muerte del general Santander”. Fue el primer colombiano que montó un estudio fotográfico en Bucaramanga. Su pintura se caracteriza por el tratamiento especial que le da al color rojo y al realismo de sus imágenes.
Fue presidente de la Academia de Dibujo de Bogotá. Su obra para El Rosario fue el Retrato de Manuel Rodríguez.
Ricardo Acevedo Bernal: importante retratista nacido en Bogotá el 4 de mayo de 1867. Estudió en Nueva York entre 1890 y 1898, fue nombrado miembro de la liga de artistas de Nueva York, al regresar a Colombia, formo la academia de pintura, donde ejerció la docencia. También, llevó a cabo incluso proyectos arquitectónicos, junto con la realización de obras de caballete y de pintura mural, como en la catedral de Tunja, San Antonio de Bogotá, El Sagrario y el Voto Nacional.
Acevedo iluminaba los fondos y utilizaba la luz natural para trabajar unas figuras más ágiles y vitales, en contadas ocasiones practicó el paisaje.
Sus obras para el Rosario fueron: Alegoría al Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario (1918), Retrato de Nepomuceno Núñez (1930), Retrato de Joaquín Caicedo y Flores, Retrato de Nicolás Esguerra (1928), La niña de la columna (actualmente en el Museo Nacional de Colombia), retrato de Simón Bolívar, retrato de Santander, Retrato de Rafael Reyes, Autorretrato, Retrato de Antonio Nariño y el Retrato de Rosa Beister de Acevedo.
Eugenio Cerda: nació en Bogotá en 1879, fue un pintor y músico que se caracterizaba por la inclusión de impresionismo en sus pinturas, así como una influencia neo costumbrista.
Algunas de sus obras más importantes son: el último toque (1904), el parque (1910), el baño (1910), camino al mercado (1945). En sus cuadros se ve mucho el manejo del movimiento y las transparencias, así como la tendencia impresionista. Fue el primero en el país en hacer desnudos, donde se hacia un resalte especial al contorno de la figura humana. Para el Rosario pintó el Retrato de Liborio Zerda.
Ricardo Gómez Campuzano: nació en 1891, se decido a hacer retratos, paisajes, bodegones e interiores, en sus obras se caracterizaba utilizar un estilo académico en pinturas en espacios cerrados, y un estilo impresionista para paisajes, y escenas al aire libre.
No manejaba el color negro, como era común en el impresionismo. Su obra para el Rosario fue el Retrato del rector José Vicente Castro Silva.
José María Espinosa: Pintor, dibujante, grabador y caricaturista que nació en Bogotá en 1796, como era autodidacta, desde muy joven se enlisto en las filas del ejército independentista, fue capturado por el ejército español en la batalla de Cuchilla del Tambo, logró escapar y durante sus pericias como prófugo, aprendió muchas técnicas de arte indígena, con las cuales perfeccionó sus especialidades que eran el dibujo en miniatura y la caricatura.
Al lograr ser indultado por el general Murillo, se radicó en Bogotá, donde de dedico a la caricatura de algunos hechos políticos de la época, después de lograr la independencia se convirtió en el pintor de Libertador Simón Bolívar. Como caricaturista pintó en acuarela, aplicando, el manejo de la tinta, tenía una técnica muy especial, por tal razón se pudo descubrir que el retrato de Camilo Torres, que se encuentra en la Universidad del Rosario es de su autoría. Murió en el 24 de febrero de 1883.
Andrés de Santamaría: nació en Bogotá en 1860, desde muy corta edad se fue a vivir a Europa, en 1882, después de la muerte de su padre, estudió en la Escuela de Bellas Artes de Paris, trabajo en los talleres de Jacques Ferdinand Humbert y Henri Gervex. En Paris presencio el nacimiento del impresionismo y conoce a Edouard Manet y Claude Monet, importantes exponentes de este estilo. Se caso en 1893 con Amalia Bidwell Hurtado y tuvo 8 hijos.
Regresó a Colombia en 1894 y por recomendación del presidente Rafael Reyes, fue nombrado profesor de paisaje y desnudo de la Escuela Nacional de Bellas Artes, este ultimo causando gran revuelo en la sociedad capitalina, en unas vacaciones con su familia en Europa, conoció en post- impresionismo, de la cual, es un importante representante, Vincent van Gogh. Fue nombrado Director de la Escuela Nacional de Bellas Artes e inauguró la Escuela Profesional de Artes Decorativas e Industriales, anexa a la de Bellas Artes.
Después de su regreso a Europa, expuso en Bruselas, Paris y Londres. Murió en 1945 a causa de una infección renal.
Entre sus principales obras esta: Las lavanderas del sena, con el cual obtuvo su primer premio, Los fusileros, Autorretrato, En la playa de Macuto, Palmeras de Macuto y obra Dragoneantes de la Guardia Inglesa , para el Colegio del Rosario pintó el retrato de Monseñor Rafael María Carrasquilla (1904).
Su estilo fue altamente marcado por el impresionismo, el claro dominio de las reglas académicas, imágenes fieles a la realidad. Sus principales temas eran, naturalezas muertas, cuadros religiosos, retratos, desnudos femeninos y escenas de divertimento al aire libre.
Héctor Osuna: caricaturista nacido en Medellín, se dedica principalmente a temas políticos, graduado en Jurisprudencia de la Universidad del Rosario. Sus críticas, expresadas de una manera divertida son muy conocidas y respetadas por los grandes personajes de la vida nacional.
A pesar de ser un gran periodista, alternaba su profesión con su talento, el cual desarrollaba de dos técnicas: una, en la cual hace trazos gruesos y planos con tinta china. Y otra en la que además de lo primero aplica sombra en las imágenes.
Para el Rosario realizó el retrato de Antonio Rocha.
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